Termochimeneas de leña
Esto es el no va más de las chimeneas, o al menos a mí me lo parece.
Una chimenea de leña insertada que además calienta agua para surtir de calor a los radiadores y proporciona agua caliente.
Como aprovechar al máximo el combustible de la leña para otras funciones, además de la chimenea del salón.
Cómo funciona una termochimenea
Termochimenea o incluso más conocida por el término chimenea calefactora o incluso chimenea de agua.
El calor que genera la chimenea de leña se aprovecha para calentar el agua que circula por los conductos del resto de radiadores (por eso lo de chimenea calefactora) y proporciona agua caliente (por aquello lo de chimenea de agua).
El funcionamiento de una termochimenea o chimenea calefactora es similar al de una caldera. El calor que desprende la chimenea se canaliza por un circuito de agua que surte a los radiadores y también puede pasar a un depósito que suministra agua caliente al baño y a la cocina.
En realidad las posibilidades las da la instalación, es decir, la termochimena calienta el agua y según sea el circuito que se realice surte de agua caliente a los radiadores o lo hace debajo del suelo como si fuera un suelo radiante. Que también caliente un depósito para el agua puede ser una buena opción, o no. Es posible que no quieras tener que encender la chimenea para tener agua caliente.
Ventajas de una chimenea calefactora
La principal es el consumo. Con la combustión de un mismo material, la leña (aunque también existen de pellets y biomasa) lo estaríamos aprovechando para varios usos diferentes. Menos consumo de combustible y mayor eficiencia. El ahora energético puede ser importante. Figúrate que si se trata de una casa grande puedes prescindir de otros sistemas de calefacción como radiadores por caldera de gas o radiadores eléctricos. Dos energías en escalada de precios.
Es más ecológico por el uso un material totalmente natural y no necesitar de otros combustibles adicionales como el gas o la electricidad.
Inconvenientes de una chimenea calefactora
Para mi manera de ver el mayor inconveniente: la instalación.
Si es una casa de obra nueva y lo tienes planteado desde el principio: genial. Pero si pretendes instalarla en casa ya levantada, te esperan obras importantes.
Dependerá de si solo quieres agua caliente para surtir a los radiadores o solo agua caliente para el baño y cocina o si lo quieres todo, entonces prepárate para una buena obra. Yo me buscaría un profesional experimentado en este tipo de instalaciones por una cuestión de seguridad.
Otro inconveniente que le veo a estas termochimeneas es que es necesario tener encendido el hogar para tener agua caliente, a no ser que lo tengas por separado. Yo optaría por tener una caldera para el agua caliente por otro sistema.
El precio de una termochimenea es también alto. Creo que queda compensando si de verdad se van a aprovechar sus ventajas.
Como opinión personal, si tu casa se sitúa en una zona donde los inviernos son muy fríos y largos, creo que una chimenea calefactora o termochimenea es una opción acertada.